Inmunoestimulantes para la industria salmonera a partir de cultivos sustentables de microalgas

La industria salmonera, así como otras industrias de producción animal a gran escala requieren de dietas más saludables y que ojalá aporten al estado de salud de los animales en cultivo. Desde hace varias décadas se sabe que los beta-glucanos, polímeros presentes en microorganismos, estimulan el sistema inmune mejorando la respuesta de los seres vivos frente a sus patógenos.

En Chile la industria salmonera se viene levantando luego de sufrir una grave crisis sanitaria debido al brote de ISAv. En cultivos intensivos de salmónidos, la manipulación, el confinamiento y las condiciones químicas y físicas propias del sistema producen estrés fisiológico y daño físico a los peces, aumentando el riesgo de mortalidad por microorganismos oportunistas o agentes patógenos.

Uno de los focos de atención de la industria acuícola está en la prevención de estas enfermedades estimulando el sistema inmune del pez, ya sea a través de vacunas, pre/pro-bióticos o inmunoestimulantes. Uno de los compuestos descritos por su capacidad de estimular el sistema inmune innato de los peces y que es actualmente utilizado en la industria acuícola es el beta-glucano extraído de la levadura del pan Saccharomyces cerevisiae. La aplicación de profilácticos como los beta-glucanos durante las etapas tempranas de desarrollo mejora la salud de los peces, estimulando principalmente al sistema inmune no-específico para crear una defensa contra ataques virales, bacterianos y fúngicos. En la naturaleza estos beta-glucanos pueden ser encontrados en distintos organismos. Sin embargo, las microalgas pueden acumular más cantidad que las levaduras y según estudios preliminares, tendrían mayor efecto inmunoestimulante que sus homólogos de levadura.

Se seleccionaron especies de microalgas acumuladoras de beta-glucanos y se estandarizaron las condiciones de cultivo para optimizar el rendimiento en biomasa y beta-glucano.

 Los resultados obtenidos sugieren que se identificó una especie de microalga cuya respuesta inmunitaria medida a través de la expresión de genes por qPCR, mostró una tendencia similar o superior a la observada utilizando el beta glucano comercial obtenido desde levadura de cerveza.  A su vez, la dieta que contenía esta microalga no afectó el proceso de engorda y factor de conversión de los peces evaluados.  Sin embargo, al realizar en alevines de salmón atlántico un ensayo de desafío con la bacteria intracelular Piscirickettsia salmonis, obtuvimos igual mortalidad que el control sin microalga.

Nuestros resultados sugieren que la inclusión de biomasa microalgal en el alimento de alevines genera una respuesta inmunitaria en el pez, alcanzando niveles similares a los registrados con el inmuno-estimulante comercial. Sin embargo, los costos de producción de microalgas calculados dentro del proyecto señalan que aún es necesario trabajar en la tecnología de obtención de biomasa microalgal, para que este producto pueda competir en precio con la alternativa existente en el mercado.